viernes, 23 de diciembre de 2011

El TITANIC y sus remaches

Carta Náutica que indica el lugar del hundimiento del Titanic

En este punto enmarcado con las coordenadas que aparecen en al grafico, tuvo lugar en la fatídica noche del 14 al 15 de Abril de 1912, el fatal encuentro con un iceberg y posterior hundimiento del buque “TITANIC”, durante su viaje inaugural desde Southampton a Nueva York,  lo que ocasionó la pérdida de 1517 vidas en el naufragio.

El buque, como su gemelo “Olimpic”, en ese momento ya en servicio activo, había sido construido en el astillero “Harland and Wolff” en Belfast, con destino a la compañía armadora “White Star” bajo las últimas y más avanzadas técnicas de construcción naval.

Sin embargo, al contrario que los buques Mauritania y Lusitania pertenecientes a la Compañía “Cunard Line” con los que pretendían competir en lujo y prestaciones, que habían sido sometidos a la revisión, inspección, y clasificación por Lloyd´s Register como era habitual en aquel tiempo, ni el Olympic ni el Titanic, fueron sometidos  a ninguna revisión independiente y en consecuencia no fueron clasificados.

A pesar de la tan extendida teoría de que el choque con el iceberg produjo una gran grieta en el casco por donde penetraba el agua, inmediata causa del hundimiento, investigaciones posteriores, han demostrado que en realidad se produjeron varias aberturas discontinuas en el casco, en la zona sumergida de estribor, a proa, lo que refuerza la teoría de que el fallo de los remaches que unían las chapas, ocasionó la apertura de las uniones y la consecuente penetración del agua.

Se da la circunstancia, de que por una seria avería del casco del Olympic, ya en servicio regular durante la construcción del Titanic, hubo que desviar urgentemente parte del personal remachador del astillero para su reparación. En consecuencia y para no retrasar más su construcción, en la zona de proa del Titanic, se optó por el empleo de remaches de hierro, más blandos y fáciles de trabajar que los de acero.

El estudio de las calidades de estos remaches recuperados en recientes incursiones submarinas, ha mostrado que sus características eran inferiores a las solicitadas por entonces por las Normas y Reglas de clasificación del Lloyd´s Register.

 Lo curioso es que en las encuestas judiciales posteriores al naufragio, las razones que se adujeron acerca de la ausencia de revisiones e inspecciones independientes, fueron ¡ahorros de coste!….en el buque más lujoso de la Historia…